sábado, 21 de marzo de 2009

~FILOSOFÍA DEL COSMOS~: "Ciclos"



(Escrito el 21 de noviembre de 2006)

Ciclos, la vida misma los causa y a su vez ellos causan la vida de la humanidad. Mientras unos terminan, otros comienzan. Mientras unos ríen, otros lloran. Mientras unos gozan, otros se agobian. Mientras unos se preocupan por pensar, otros se ocupan de sentir; y mientras los unos hacen todo lo que los otros no, ambos grupos son inconcientes de que se intercambiaran de papeles en el escenario de la vida. Pero es casi imposible el querer quedarse con un rol específico, todos y cada uno de nosotros somos tan circunstanciales como eternos en el universo. Mientras las emociones existan dentro de nosotros y las dejemos aflorar, seremos infinitos en vida. Porque la vida no es exactamente tener un cuerpo, sino preservar el espíritu, y el espíritu vive de sentimientos. Al transmitir las emociones nos volvemos a crear a nosotros mismos sin darnos cuenta, porque sentir nos resulta tan habitual como respirar o parpadear. La vida entonces se vuelve en un ciclo ininterrumpido dentro de nosotros, pero el hecho de que sea un círculo constante no quiere decir que sea monótono o repetitivo. En el camino surgen seres y cosas nuevas a una manera similar a la que surgieron las que ahora son viejas. En este mundo lo antiguo y lo novedoso se encuentran incesantemente, y por ser superficiales se repelen la mayor parte del tiempo. A ambos les cuesta aprender el uno del otro durante su convivencia en este mundo, y casi nunca se hablan; mas no valora lo Nuevo que algún día será viejo con el pueril pretexto de no dejarse perturbar por lo que aun no le sucede. Y lo Viejo, en el peor de los casos, se resigna a su mortalidad y no se preocupa por tratar de renovarse internamente, porque cree haber sido y estado lo suficiente ya. Esa ceguera hace caer a lo Ancestro en un profundo vacío de desolación en el que se perderá eternamente si deja a la obstinación ganar la batalla. Lo Viejo no se da cuenta al final, pero aun vive en la huella que dejo al haber pasado por la playa de la vida. El mar se lo llevo por siempre a la incertidumbre de sus olas, pero por alguna extraña razón aun subsisten esas marcas de pasos en la arena: es por la melancolía de lo Nuevo que, aunque fuese en el último momento, aprendió a valorar y a aprender de lo Viejo. Y he allí el cumplimiento de un ciclo más que se desprende de la filosofía del cosmos.

1 comentario:

  1. Me gusta tu estilo poético (en prosa) Disculpa pero soy ignorante en literatura y poesía. Pero en fin, de lo que quisiera llamar tu atención es que, hay un cierto reconocimiento de tu parte también de la dialéctica ya que, los ciclos como los describes resultan en un movimiento de contrarios. La dialéctica afirma que todo lo que existe crea su propio germen de destrucción que en realidad es su contrario. Pero que esta contradicción de que lo nuevo va desarrollándose hasta acabar o reemplazar a lo viejo, tu le asignan a cada objeto, como un ciclo, lo cual es correctísimo.
    Por otro lado, yo estaba escribiendo algo que pensaba denominar (con excesiva presunción) la Filosofía del Universo. Esta filosofía se basa en la unión indisoluble del hombre con la naturaleza, pero restándole protagonismo e individualismo al hombre. Me explico, la naturaleza puede vivir y ya lo ha hecho miles de millones de años sin el hombre; pero el hombre no puede vivir sin la naturaleza. Y justo estuve pensando en una nueva característica y al prever que podían ser lo ciclos me encuentro con tu blog.
    Espero que me escribas a luissamamem@gmail.com.

    ResponderEliminar